Sintámonos orgullosos de vivir en Costa Rica

Mensaje para el Acto Cívico del 14 de setiembre de 2022.
Parque de Ciudad Quesada, 6:00 p.m.

Al dar gracias a Dios por la oportunidad de celebrar como comunidad sancarleña un aniversario más de vida independiente de nuestro país, elevo una oración a nuestro Señor para que proteja la vida de todos quienes vivimos al abrigo de esta tierra bendita que es Costa Rica.

El recuerdo de un acontecimiento histórico, como es el que hoy celebramos, nos hace tomar conciencia de que otros en el pasado han luchado para que gocemos hoy de 201 años de independencia. No podemos olvidar las luchas que cimentaron las raíces de lo que es hoy nuestra patria.

Todo ello debe movilizarnos a tomar acción para defender aquello que hemos heredado para nuestro bien; no podemos quedarnos pasivos cuando ideologías externas quieren socavar los principios que han hecho grande a nuestra nación.

En medio de la celebración de más de dos siglos de vivir en libertad, reafirmemos nuestro respeto por la vida desde la concepción hasta su muerte natural; trabajemos con más fuerza por el bien común para que haya acceso a la educación, para que nuestro sistema de salud se mantenga a la vanguardia.

Podría citar muchos ejemplos que nos llenan de orgullo, en medio también de obstáculos y tropiezos que nos obligan a luchar por aquello en que creemos.

Las numerosas familias que viven en pobreza y tantas personas que no tienen acceso a un empleo digno, nos ponen ante el gran reto de que nuestra sociedad debe trabajar por crear más y mejores condiciones de desarrollo integral, sin que haya exclusión de ningún hermano nuestro.

Somos también un pueblo creyente que puede manifestar de manera libre su fe, y por ello, hoy, también pido a Dios que nos siga acompañando, que nos ilumine y nos dé la fuerza para seguir adelante. No podemos sacar a Dios de nuestras vidas. No debemos olvidar nuestras raíces cristianas.

Sintámonos orgullosos de vivir en Costa Rica, de poder celebrar estos 201 años de vida independiente. Demos gracias por nuestra idiosincrasia, por nuestra cultura y por nuestro cantón.

Sabemos que no todo es fácil, que hay que luchar y trabajar para salir adelante, pero hagámoslo con esperanza, unidos unos a otros, dejando de lado cualquier signo de división, egoísmo y pesimismo.

Pidamos al Señor que nos guíe e ilumine para que vivan siempre el trabajo y la paz, y para que mantenga unida a esta nación soberana e independiente ¡Que Dios bendiga hoy y siempre a Costa Rica!