Catedral Ciudad Quesada: Jesús entre los habitantes de la calle

Este viernes 21 de diciembre a las 7 de la mañana, los salones de la Parroquia Catedral San Carlos Borromeo, en Ciudad Quesada, abrieron sus puertas para atender a los habitantes de la calle, en el marco de una acción que se denominó Desayuno Seamos Jesús, pues bajo el lema, Seamos Jesús, la Iglesia ha vivido este Tiempo de Adviento en nuestra Diócesis.

Muchas personas contribuyeron para hacer realidad el Desayuno Seamos Jesús.

Duchas preparadas para que pudieran darse un baño, jabones, pastas de dientes, paños, rasuradoras y otros implementos para su aseo personal eran parte del panorama de los salones. Luego, los habitantes de la calle, hombres y mujeres, podían escoger ropa que fieles de la Diócesis entregaron en los últimos días para atender al necesitado.

Posterior al baño, jugo, frutas, gallitos de salchichón, gallo pinto, huevo picado, café, natilla, pan y café, era el menú que tenían a la mesa, donde se sentaron a compartir.

Monseñor José Manuel Garita, Obispo de Ciudad Quesada, y párroco de la Catedral, les dio un mensaje a pocos días de la Navidad. “El que nace es Jesús, es el amor, y queremos hacerles sentir que tenemos las puertas abiertas para ustedes, para atenderlos, con alimento y comida, y con la cercanía, queremos que se lleven este mensaje de paz, de armonía, entendiendo las dificultades que ustedes pasan”.

El Desayuno Seamos Jesús, es parte de la acción de Pastoral Social que lleva adelante la Diócesis. Para esta oportunidad, el Colegio Diocesano, Radio Santa Clara y la Pastoral Social de la Catedral, se unieron para que los habitantes de la calle tuvieran una mañana diferente.

Monseñor Garita destacó el esfuerzo y la mística de decenas de servidores que llegaron a preparar la comida, la ropa, y que atendió a estos hermanos a la hora de bañarse. Asimismo, el Obispo agradeció el desinteresado apoyo de muchas personas que contribuyeron donando alimentos, ropa y todo lo referente a lo que se ocupaba para el baño de los habitantes de la calle.

Casa de la Misericordia San Vicente de Paúl

La apertura de la Casa de la Misericordia San Vicente de Paúl fue parte del anuncio que el Obispo de Ciudad Quesada regaló esta mañana. Una Casa de puertas abiertas en la Iglesia, una acción pastoral que nos permite tener y vivir los mismos sentimientos de Jesús.

Había ropa para los habitantes de la calle, para que pudieran cambiarse luego del baño.

“Establecer relaciones sanas con los demás, las cuales deben estar regidas por el reconocimiento de la existencia de otros seres humanos, a los que les debemos respeto por la dignidad que cada uno posee”, dijo Monseñor, recordando sus palabras en la V Carta Pastoral No volverás la espalda a tu hermano.

“Motivados por las exigencias de la misericordia y la necesidad de desarrollo integral de los hermanos más necesitados, creamos en la Diócesis de Ciudad Quesada, la Casa de la Misericordia San Vicente de Paúl”, indicó el Obispo.

Esta Casa es una acción pastoral para toda la Diócesis, que tendrá varios objetivos:

  • Acoger a los afectados por el pecado social como verdaderos hermanos a quienes acompañar, reconociendo la causalidad de sus gritos.
  • Proteger a los que están siendo víctima de exclusión que los vulnera en su dignidad, con signos reales que ratifiquen que la Iglesia es el hogar de todos.
  • Promover a los empobrecidos para que se desarrollen en medio de una sociedad justa, practicando sus talentos y capacidades.
  • Integrar dentro de la comunidad eclesial y social, para que participen como actores de transformación en la construcción de la paz basada en la justicia.

Instalaciones que posee la Iglesia Católica en Barrio Lourdes, donde históricamente ha atendido a habitantes de la calle, desde hace más de ocho años, serán parte de la labor que emprende esta nueva obra anunciada por Monseñor José Manuel Garita.

Entre los habitantes de la calle, el Obispo se mostró feliz de que la Iglesia pueda continuar su obra de atención, mostrando el rostro misericordioso de Dios, al tiempo que les deseó una Feliz Navidad y un venturoso año nuevo, además de confirmar la cercanía que como Pastor y como acción de Pastoral Social, tendrán estos hermanos necesitados.

Con la Casa de la Misericordia San Vicente de Paúl, muchas más acciones seguirá emprendiendo la Iglesia en Ciudad Quesada, con el fin de atender a todo aquel hermano necesitado.