
Recientemente Monseñor José Manuel Garita, recibió a la señora Priscilla Porras Fernández, Directora de la Campaña 40 Días por la vida Costa Rica, y presidenta de la Asociación Pro Vida Costa Rica.
“Esta Campaña consiste, precisamente, en 40 días de Vigilia frente a la Asamblea Legislativa (en horario de 6:00 a.m. a 6:00 p.m.), además de oración, ayuno y educación de alcance comunitario, desde el 26 de setiembre hasta el 4 de noviembre del año en curso”, destacó el Obispo de Ciudad Quesada.
“Como Pastor de la Iglesia, como creyente y como costarricense, apoyo y bendigo esta actividad, para que, de modo pacífico y confiando en el Señor, se pueda crear conciencia en nuestros legisladores de no aprobar leyes que atenten contra la vida, siendo éste el principal derecho humano”, señaló Monseñor Garita en un comunicado que realizó a sacerdotes y fieles de esta Iglesia Particular.
“Como creyentes, particularmente, como cristianos católicos, estamos llamados a colaborar en la construcción del Reino de los Cielos, y qué mejor manera que hacerlo, defendiendo la corona de la creación, la persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios”, indicó en su mensaje.
Asimismo, agregó: “insto, animo y bendigo a toda la comunidad católica en particular, a los creyentes en general y a todas las personas de buena voluntad, para que sigamos trabajando por fortalecer la cultura de la vida. Es menester, para cumplir estos 40 días de vigilia, la participación masiva de las personas, como signo de un país que es creyente y defensor de la vida, desde la concepción hasta su muerte natural”.
En su mensaje, recordó palabras del Papa Benedicto XVI, de la Encíclica Caritas in veritate, numeral 18: “La apertura a la vida está en el centro del verdadero desarrollo. Cuando una sociedad se encamina hacia la negación y la supresión de la vida, acaba por no encontrar la motivación y la energía necesaria para esforzarse en el servicio del verdadero bien del hombre”.
“Con estas palabras, hagamos de Costa Rica una nación al servicio de la persona humana, que ponga, de una vez por todas, la vida en el centro de nuestra sociedad, para procurar el desarrollo deseado, donde nadie sea descartado. Al Señor Jesucristo -esperanza que nunca nos frauda- confiamos ésta feliz iniciativa que nos anima en la búsqueda del bien común y en el respeto de la vida humana”, añadió el Obispo diocesano de Ciudad Quesada.